Estados
Unidos ha intentado dar varios mazazos a Huawei, pero la compañía china ha
sabido esquivar, hasta el momento, todos los golpes y ha encontrado
alternativas que le han permitido seguir adelante.
Sin embargo,
ese tira y afloja entre la Administración Trump, que podría estar a punto de
pasar a la historia, y el gigante chino, han servicio como un
aviso contundente para Huawei. La compañía ha aprendido la lección, es consciente de que no
puede depender por completo de Estados Unidos, y por ello está trabajando para
reducir esa dependencia en sectores clave.
Uno de los
más importantes es, sin duda, el del software y los servicios móviles. El veto
comercial impuesto por Estados Unidos a Huawei obligó a esta a dejar
de utilizar los servicios móviles de Google, y esto incluía la tienda de
aplicaciones Google Play Store. Fue un golpe duro, pero Huawei logró sobreponerse utilizando una
versión personalizada de Android y su propia tienda, la AppGallery.
Lo que parecía
una limitación temporal se acabó alargando demasiado, tanto que Huawei ha
invertido grandes sumas en potenciar su alternativa a Android, HarmonyOS 2.0, y su ecosistema
de aplicaciones. Con esto en mente, es probable que la compañía ya
no vuelva a utilizar ni Android ni los servicios de Google, con el perjuicio que
esto supone, también, para la compañía de Mountain View.
Por otro lado,
debemos tener en cuenta las restricciones que Estados Unidos ha intentado poner
a Huawei en lo que respecta al acceso a fabricantes avanzados
de semiconductores. Las últimas medidas establecidas por la Administración Trump impidieron el acceso de Huawei a TSMC,
una barrera que la compañía china está dispuesta a superar.
Según fuentes chinas, Huawei está
trabajando para empezar a producir a nivel nacional (en China)
semiconductores con su socio Shanghai IC R&D. De momento se encuentran
en una etapa bastante temprana, y que no han logrado llegar a un proceso
avanzado de 28 nm, pero es comprensible, ya que están intentando sacar adelante
el desarrollo de procesos avanzados de fabricación de semiconductores sin tener
que depender en absoluto de tecnología estadounidense.
Si Huawei logra
completar este paso, la compañía acabará siendo casi totalmente inmune a las
presiones de Estados Unidos, y tendrá asegurado todo lo que
necesita tanto a nivel de hardware como de software. Será interesante ver
hasta dónde es capaz de llegar la compañía china en esta nueva aventura.
Fuente: https://www.muycomputerpro.com/
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